miércoles, 13 de julio de 2011

Los objetivos primordiales son educar y culturizar

Prensa y radiodifusión



PERIODISTA *
 

 
La Constitución Política del Perú garantiza la libertad de expresión, opinión, información y difusión sin limitación y responsabilidad por las opiniones vertidas (Art. 2 Inc. 4). En esto todos estamos de acuerdo.

Para refrescar la memoria recordemos que el Congreso aprobó en 1965 la Ley N° 15639, que reconoce la Profesión del Periodista y en 1980 la Ley N° 23221 que crea el Colegio de Periodistas del Perú. Esta última establece que es obligatoria la colegiación para el ejercicio del periodismo.

Sin embargo el gobierno de Fujimori arrasó con todas estas normas legales para fines nocivos que todos conocemos, como la manipulación de los medios de comunicación. Para ello dio la Ley N° 26937, conocida como la Ley Torres y Torres Lara, con la que se estableció que para ejercer el periodismo “no se necesita ser periodista profesional ni colegiado”.

Esta ley es la “madre del cordero” que ha desencadenado una serie de males en el manejo informativo, que ha dado lugar a la llamada “prensa chicha” o “prensa vulgar” carente por cierto de ética profesional en el ejercicio periodístico. La irresponsabilidad informativa cada vez se agrava, sin tener en cuenta la dignidad y el honor, una falsa prensa que difama y denigra.

Este fenómeno no ocurre sólo en Trujillo. En el resto del país también, de manera marcada en la radiodifusión. Han surgido espacios “periodísticos” en la radio y televisión, con mayor incidencia en la primera. Se concesionan espacios sin mayor requisito que el DNI sin exigir preparación académica y formación humana. No importa si el que compra el espacio tenga primero de primaria. Un contrasentido que debe ser eliminado.

Sin embargo para evitar que la radio y la televisión desvíen sus objetivos de educar y culturizar, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones emitió en el 2006 la Resolución Ministerial N° 801-2006-MTC /03 que aprueba los Código de Etica para la prestación de los servicios de radiodifusión comercial, educativa y comunitaria. Muy poco se cumple.

El artículo 34 de la Ley de Radio y Televisión, Ley 28278, establece que los titulares de los servicios de radio y televisión deben regir sus actividades conforme al Código de Etica que ellos mismos establezcan, en el cual deben incluirse disposiciones como las referidas al horario familiar, mecanismos de autorregulación y la regulación de la cláusula de conciencia.

Señala la Ley que los titulares del servicio de radiodifusión de manera individual o asociada aprueban su Código de Etica, remitiendo copia del mismo al Ministerio o en su defecto tendrán que acogerse al Código de Etica que apruebe el Ministerio. ¿Cuántas radios en Trujillo tienen su Código de Etica?

En este aspecto los servicios de radiodifusión se rigen por los siguientes principios: La defensa de la persona humana y el respeto a su dignidad, la libertad de expresión, de pensamiento y de opinión, el respeto al pluralismo informativo, político, religioso, social y cultural; así como a la libertad de información veraz e imparcial, el fomento a la educación, cultura y moral de la nación, la protección y formación integral de los niños y adolescentes, el respeto de la institución familiar, el respeto al honor, la buena reputación y la intimidad personal y familiar y el respeto al derecho de rectificación.

Uno de los puntos fundamentales es que la programación que se trasmite en el horario de protección familiar (06.00 a 22.00), debe evitar los contenidos violentos, obscenos o de otra índole, que puedan afectar los valores inherentes a la familia, a los niños y adolescentes.

Es urgente que los titulares de los medios de radiodifusión actúen con mejor celo y criterio para evitar que sus estaciones radiales o televisivas se pueblen de inescrupulosas personas que optan por el micrófono o el set de televisión para manejar a su antojo la información y deterioren el rico lenguaje que tenemos con palabras soeces.

Trujillo ha sido y es una ciudad culta y por lo tanto necesita de mejores servicios de radiodifusión, sobre todo en espacios destinados a la información del acontecer diario, a fin de contribuir a mejorar los niveles de educación y cultura.


• Decano del Colegio de Periodistas de La Libertad




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